James Reese Europe: Ritmos de guerra, dignidad y jazz en marcha

 









Cuando el barco SS Pocahontas tocó tierra francesa el 1 de enero de 1918, con la banda del 369.º Regimiento de Infantería en cubierta, el Viejo Mundo recibió su primer contacto con una nueva música afroamericana que cambiaría para siempre el curso de la cultura popular. En el centro de esta avanzada cultural estaba el teniente James Reese Europe: músico, director, sindicalista y visionario.

Europa no solo fue el primer afrodescendiente en dirigir tropas de combate en el Ejército de EE.UU., sino que también fue el primer afroamericano en conquistar los salones de la alta sociedad blanca con la fuerza y sofisticación del ragtime orquestal. Su figura condensa un momento clave en la historia del jazz: su paso de la marginalidad al centro de la escena, de la danza al escenario bélico, del entretenimiento al gesto político.

Antes de la guerra, Europe ya era una figura destacada en la vida musical de Nueva York. En 1910 fundó el Clef Club, una institución que funcionaba como sindicato, agencia de contratación y red de apoyo para músicos afroamericanos. A través de este espacio logró organizar conciertos sin precedentes, como el del Carnegie Hall en 1912, donde dirigió una orquesta de más de 100 músicos negros interpretando música de compositores negros para una audiencia mayoritariamente blanca.

Este evento, documentado en la prensa de la época y recogido en las crónicas del propio Europe, marcó un hito: por primera vez, una orquesta negra se presentaba en el escenario más prestigioso de Estados Unidos con repertorio propio (véase Southern, 1997).

Además, Europe trabajó con los bailarines Vernon e Irene Castle, revolucionando la música de salón al incorporar una sección rítmica moderna y sincopada. Su estilo introdujo el ragtime orquestal a públicos blancos y pavimentó el camino para la aceptación del jazz como género legítimo.

 

Con el estallido de la Primera Guerra Mundial, Europe se alistó en el 15.º Regimiento de la Guardia Nacional de Nueva York, una unidad compuesta por soldados afroamericanos que luego sería renombrada como el 369.º Regimiento de Infantería, conocidos como los Harlem Hellfighters.

Europe fue comisionado como teniente y se le encargó formar la banda militar del regimiento. Para ello, viajó hasta Puerto Rico, reclutando músicos como Rafael Hernández, que aportarían un color caribeño a la ya vibrante mezcla afroamericana. La banda debutó en Francia en 1918, y según reportes de la época, causó sensación entre los soldados aliados y el público europeo. Su interpretación de Memphis Blues fue descrita por un oficial francés como “la música más energética que jamás había escuchado” (Badger, 1985).

La banda no solo tocaba para animar a las tropas, sino que participaba de eventos oficiales, desfiles y conciertos masivos, incluyendo uno en los Jardines de las Tullerías ante más de 50 000 personas.

Muchos historiadores coinciden en que la banda del 369.º, bajo la dirección de Europe, fue el primer conjunto afroamericano en introducir el jazz en Europa, anticipándose incluso a figuras como Sidney Bechet o Josephine Baker. Según Jeffrey Magee (2005), el impacto de estas actuaciones fue “seminal” en la propagación temprana del jazz en el continente.

El periodista musical Eubie Blake sostuvo: “Lo que hizo James Reese Europe fue más importante que cualquier gira de jazz posterior. Llevó nuestra música a una guerra y regresó con un legado”.

El 9 de mayo de 1919, durante una gira en Boston, Europe fue asesinado por su baterista Herbert Wright en el camerino. Tenía solo 39 años. Su funeral en Harlem congregó a miles de personas. Fue enterrado con honores militares, y su figura fue ampliamente homenajeada por músicos, activistas y líderes comunitarios.

James Reese Europe encarna el cruce entre arte, resistencia y diplomacia cultural. Profesionalizó la música negra, la proyectó a nivel internacional y defendió el derecho de los músicos afroamericanos a ser tratados con dignidad. Su historia anticipa muchos de los debates contemporáneos sobre representación, apropiación y justicia racial en la música.

En la línea de tiempo del jazz, su figura ocupa un lugar clave: el de quien supo hacer de la marcha militar un acto estético y político, y del ragtime una fuerza que marchó —literalmente— sobre Europa.

Para quienes deseen profundizar en la figura de James Reese Europe, su legado musical y su influencia en el desarrollo del jazz en Europa y América, recomiendo la lectura del mi libro Las Rutas del Jazz. Allí abordo con mayor detalle los contextos sociales, musicales y políticos que rodearon su trayectoria, así como su vínculo con otras figuras pioneras del jazz afroamericano.

Por Marcelo Luis Bettoni

Bibliografía y fuentes

Badger, Reid. A Life in Ragtime: A Biography of James Reese Europe. Oxford University Press, 1995.

Magee, Jeffrey. The Uncrowned King of Swing: Fletcher Henderson and Big Band Jazz. Oxford University Press, 2005.

Southern, Eileen. The Music of Black Americans: A History. W. W. Norton, 1997.

Horne, Gerald. Jazz and Justice: Racism and the Political Economy of the Music. Monthly Review Press, 2019.

Publicaciones del Carnegie Hall Archives.

Registros fonográficos de la Victor Talking Machine Company (1913–1919).

Europe’s Jazz Band Lands in France.” New York Tribune, 1918.

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